Tras quedar en el nivel más bajo en 10 años, la oleaginosa recuperó US$5,88 y cerró con un valor de 304,97 dólares; en el nivel local la exportación lideró las operaciones
Luego de cuatro ruedas bajistas consecutivas, y de quedar en el nivel de precios más bajo en 10 años, la soja repuntó ayer en la Bolsa de Chicago, por un lógico reacomodamiento técnico de un mercado sobrevendido, pero también por las lluvias que restringen el avance de la cosecha en zonas de Iowa y de Minnesota, y por la proyección de una importante caída de la superficie destinada a la oleaginosa estadounidense en el ciclo 2019/2020.
Al término de los negocios, las pizarras reflejaron mejoras de US$5,88 y de 5,78 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 304,97 y de 310,02 dólares por tonelada. Los fondos de inversión compraron unos 7000 contratos, equivalentes a poco más de 952.000 toneladas de la oleaginosa.
A casi ocho meses del inicio del próximo ciclo agrícola, anteayer la consultora Informa Economics proyectó la intensión de siembra de soja 2019/2020 en los Estados Unidos en 33,29 millones de hectáreas, un 8,2% por debajo de los 36,26 millones cubiertos en la actual campaña.
Si bien desde la firma no difundieron una valoración sobre el dato estimado, las consecuencias de la guerra comercial entre los Estados Unidos y China, que no se agotan en la caída de los precios y en la restricción para colocar soja estadounidense en puertos chinos, sino que tienen un correlato directo con un stock final previsto en un récord histórico de 23 millones de toneladas, son las principales condicionantes de la siembra de la oleaginosa.
Vale destacar que no hubo ayer entre los factores que posibilitaron el repunte de los precios de la soja noticias alentadoras en cuanto a una eventual tregua en el conflicto comercial bilateral.
Crece la demanda de poroto
En el mercado local ayer volvió a quedar de manifiesto el liderazgo que están ejerciendo los exportadores de poroto de soja. Un protagonismo que se afirmó tras la decisión reciente del Gobierno de quitarle a la industria el diferencial de 3 puntos en los derechos de exportación que favorecían la venta de subproductos, en detrimento del grano sin procesar.
En esa coyuntura, la demanda exportadora ayer ratificó los 10.000 pesos por tonelada de soja para el puerto de Necochea. El mismo valor rigió para Bahía Blanca y para la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), con mejoras de 200 y de 500 pesos frente a los valores vigentes el martes, respectivamente.
Ayer la BCR actualizó su reporte sobre carga de buques programadas y marcó que entre el 19 del actual y el 8 del mes próximo deben salir desde Necochea 101.740 toneladas de poroto de soja; desde Bahía Blanca, 66.000 toneladas, y desde otros puertos (Lima, Guazú, Las Palmas, entre otras terminales), 60.000 toneladas de soja.
La industria, en tanto, propuso ayer 9700 pesos por tonelada de soja para la zona del Gran Rosario, por encima de los 9500 pesos de anteayer. Por lotes importantes algunos compradores convalidaron hasta 9800 pesos.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y mayo de la soja sumaron US$5,20 y 7,80, mientras que sus ajustes fueron de 262,20 y de 250,10 dólares por tonelada.
Cereales
El trigo se negoció en alza ayer por segunda jornada consecutiva en los Estados Unidos. La posición diciembre en Chicago y en Kansas sumó US$4,41 y 3,76, al cerrar con un ajuste de 191,99 y de 193,36 dólares por tonelada, respectivamente.
La agencia de Estadísticas del gobierno de Canadá estimó ayer la producción total de trigo en 31,02 millones de toneladas, por encima de los 29,98 millones de 2017, pero por debajo de los 31,50 millones previstos recientemente por el USDA.
En el nivel local, la exportación pagó 8000 pesos por tonelada de trigo disponible para el Gran Rosario y 210 dólares para Bahía Blanca, sin cambios. Para Necochea los compradores también ofrecieron 210 dólares, pero en ese puerto el valor implicó una mejora de 5 dólares.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) informó que los molinos pagaron entre 7900 y 10.600 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago. El valor máximo correspondió a mercadería con 30% de gluten, una calidad muy específica para elaborar, por ejemplo, pan dulce y determinadas variedades de galletitas, y con pago a los 30 días.
Por trigo de la nueva cosecha los exportadores volvieron a pagar 182 dólares por tonelada con entrega en noviembre/diciembre sobre el Gran Rosario; 184 dólares para enero; 186 dólares para febrero, y 190 dólares para marzo.
En el Matba las posiciones diciembre y enero del trigo sumaron US$2 y 3,50, en tanto que sus ajustes fueron de 191 y de 195,50 dólares por tonelada.
Acerca del maíz, tras dos ruedas bajistas el cereal se cotizó en alza ayer en la Bolsa de Chicago, donde los contratos diciembre y marzo recuperaron US$0,90 al cerrar con ajustes de 136,12 y de 140,94 dólares por tonelada.
La Administración de Información de Energía de los Estados Unidos relevó un leve incremento de la producción de etanol en su trabajo semanal y marcó un ligero descenso de las existencias del agrocombustible. En su reciente informe mensual de estimaciones agrícolas, el USDA elevó de 142,88 a 143,52 millones de toneladas el volumen de maíz estadounidense que será destinado a la industria del etanol durante el ciclo 2018/2019.
Anteayer, Informa Economics proyectó la intención de siembra de maíz 2019/2020 de los Estados Unidos en 37,65 millones de hectáreas, un 4,4% por encima de los 36,06 millones implantados en el actual ciclo.
En la plaza local la exportación pagó 5300 pesos por tonelada de maíz para el Gran Rosario, $100 más que anteayer. Para Necochea el cereal se mantuvo en 5200 pesos por tonelada. Ese mismo valor fue propuesto para Bahía Blanca, frente a los 135 dólares vigentes en la rueda anterior.
La BCBA informó que los consumos pagaron entre 4900 y 5400 pesos por tonelada de maíz seco, según calidad, procedencia y forma de pago.
La Nación – Dante Rofi