La lenta evolución de las exportaciones estadounidenses de soja del ciclo 2018/2019 –se inició en septiembre– llevaría al Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) a reducir hoy en su informe mensual de estimaciones agrícolas la proyección de las ventas externas del país, que sigue con el mercado chino virtualmente cerrado.
Ese fue ayer el consenso entre los operadores de la Bolsa de Chicago y resultó, además, el principal factor bajista para las cotizaciones de la soja en la plaza estadounidenses. En efecto, al cierre de la rueda las pizarras reflejaron quitas de 1,56 y de 1,75 sobre los contratos noviembre y enero, cuyos ajustes fueron de 318,85 y de 323,16 dólares por tonelada.
Actualmente, el objetivo fijado por el USDA para las exportaciones de EE.UU. es de 56,06 millones de toneladas, meta que, para ser cumplida, demandaría un promedio de negocios semanal de 1,08 millones. En las últimas cuatro semanas, el promedio de ventas externas fue de solo 335.450 toneladas. En cuanto a las cifras de cosecha y de stock final, el mercado las prevé en 127,26 y en 24,44 millones de toneladas, frente a los 127,63 y a los 24,09 millones de octubre.
La Nación