Según informes de la Bolsa de Comercio de Rosario, mientras los cereales siguen en camino ascendente, los indicadores para la soja son muy negativos.
El mercado agroindustrial argentino está mostrando una fuerte disparidad en materia de exportaciones: mientras el trigo bate récords y el maíz va por el mismo camino, la soja muestra sus peores valores en seis años.
Así lo señalan dos informes difundidos por la Bolsa de Comercio de Rosario, en los que se explican los factores que explican esta tendencia tan distinta entre los cereales y la oleaginosa.
Trigo
De acuerdo a un reporte firmado por la economista Emilce Terré, el volumen de exportaciones de trigo comprometidas para esta altura de la campaña, es récord.
Según datos de la Unidad de Coordinacion y Evaluacion de Subsidios al Consumo Interno (Ucesci), al 7 de junio, se anotaron ventas al exterior para la campaña 2016/17 por 8,9 millones de toneladas, un 30 por ciento más que lo registrado a la misma altura del año pasado y casi el doble del promedio de los últimos cinco años.
“El volumen supera incluso a los 8,5 millones de toneladas anotadas a esta altura de la campaña 2011/12, cuando Argentina logró el récord de despachos de trigo con casi 13 millones de toneladas”, puntualiza Terré.
También cita datos del Indec al primer cuatrimestre, en los que se observa que el acumulado de exportaciones ya alcanza ocho millones de toneladas, 63 por ciento por encima de la campaña previa y 140 por ciento más que el promedio del último lustro.
Para Terré, “dos factores se combinaron para permitir el firme regreso de Argentina como proveedor de trigo al mundo. En primer lugar, el aumento en la producción como producto de la renovada apuesta por el cereal por parte del sector productor. En segundo lugar, la apuesta que se hizo al cuidado en el manejo del cultivo, en la búsqueda de obtener un grano de la mejor calidad posible”.
Maíz
En cuanto al cereal de verano, “todo está listo para que las exportaciones argentinas de maíz alcancen también un récord histórico en la actual campaña comercial 2016/17”, subraya Terré.
Y detalla: “Con un saldo exportable de 24 millones de toneladas y precios que vienen ganando competitividad en lo que va de junio, se estima que entre la segunda mitad de junio y por los siguientes dos meses la entrada, descarga y embarque de maíz en las terminales del Up River sumen un volumen sin precedentes”.
Un dato que sostiene esta tendencia de crecimiento es que, entre abril y lo que va de junio, el ingreso de camiones con maíz al Gran Rosario supera las 65 mil unidades, 50 por ciento más que un año atrás y 42 por ciento arriba de la media de los últimos tres años.
Soja
Del otro lado, “las ventas de exportación de soja son las peores en seis años”, se titula un informe de otro de los analistas de la BCR, Federico Di Yenno.
“La fuerte caída en el valor de la soja desde principios de año y la leve devaluación del tipo de cambio no alcanzan para impulsar el ritmo de ventas de los agricultores por lo que el sector estaría trabajando con márgenes muy negativos”, resume este informe.
Hasta el 6 de junio, la Ucesci muestra Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) por cuatro millones de toneladas, muy por debajo del promedio de 5,85 millones de las últimas cinco campañas.
“Similar ritmo se evidencia en los subproductos de la industria procesadora, pero los datos indican un mejor desempeño relativo de la harina y el aceite de soja que la exportación del poroto”, aclara Di Yenno.
Un problema, según este analista, es que los márgenes de los sectores procesadores/exportadores están muy débiles. “Han caído tanto que luego de que la soja alcanzara el valor de 3950/4000 pesos por tonelada, que tanto la exportación como el procesamiento del poroto entraron en términos teóricos en un terreno fuertemente negativo”, manifiesta Di Yenno.