Será desde el 1º de enero para un producto que hoy no tributaba derechos. Desde el Gobierno dicen que es para armonizar las retenciones del complejo exportador
En medio del conflicto abierto con Estados Unidos por su bloqueo al biodiesel argentino, al que le impuso aranceles de importación antidumping y por subsidios de más de 130% y por cinco años, el Gobierno resolvió dar de baja el esquema de retenciones móviles para la exportación de ese combustible verde, que hasta ahora estaban en 0%, por una alícuota fija de 8% a partir de enero próximo.
Según se expuso en el decreto 1025, publicado ayer en el Boletín Oficial, busca "una armonización entre los derechos de exportación del biodiesel y el de su principal materia prima, el aceite de soja, para alcanzar una convergencia entre los mismos".
El aceite de soja tributa hoy 27% de derechos de exportación. Desde enero, el diferencial del biodiesel respecto de su principal insumo estará en 19%. Desde el primer mes de 2018, ademas, arrancará el esquema de rebaja gradual para el poroto, aceite y harina, de 0,5% mensual, por lo que ese diferencial se irá achicando.
Según el plan oficial de baja gradual, a diciembre de 2019, el poroto sin procesar tributará retenciones de 18% y el aceite de soja 15%. El temor de la industria es que el diferencial entre biodiesel y aceite se neutralice en el mediano plazo con un alza mayor de los derechos de exportación del combustible verde, más que por la baja de su principal insumo.
Mirando al norte
Si bien el secretario de Comercio, Miguel Braun, le dijo a la agencia Reuters que la decisión "no tiene nada que ver" con el conflicto con EE.UU., desde el sector privado local consideran que está relacionada con contactos entre funcionarios de ambos países durante la reciente cumbre de la Organización Mundial de Comercio (OMC). Por eso, leen el alza de retenciones como una señal negociadora hacia EE.UU.
No obstante, descartan que vaya a tener un impacto positivo. Primero porque EE.UU. bloqueó con altísimos aranceles al producto local, reclamó por el diferencial de retenciones en el complejo sojero, y hace una semana la Comisión de Comercio Internacional norteamericana (Ustic, por sus siglas en inglés) los ratificó por cinco años.
Y también, desde la industria alertan que la suba de retenciones perjudicará las ventas a Europa, reabiertas, tras más de 4 años y fallo de la OMC mediante, a fines de septiembre. En ese lapso, se embarcaron más de 350.000 toneladas del combustible a rumbo a Holanda y España.
Con el alza de las retenciones, en la industria local vaticinan que se hará muy difícil colocar biodiesel en Europa. Eso porque para ingresar, el producto paga entre 8% y 10% de arancel antidumping, más otro general, de 6,14% que el viejo continente impone a países que no están en el Sistema General de Preferencias (SGP). Sumados esos aranceles y las nuevas retenciones, el costo será en torno a 25%. "Ese nivel era el que había impuesto Europa cuando nos dejó fuera de mercado en 2014", recalcó un consultor.
El Cronista – Paula López