17/12/2013

Facturar más, a veces es echar leña al fuego.

De 12 emprendimientos solo uno llega a los dos años. Luego solo el 47% llega a los cinco años, y de estas solo el 55% festeja los 15 años.
Muchas veces las Pymes argentinas piensan que facturar más es bueno, pero no nos damos cuenta que muchas veces cuenta que no siempre es así, ya que a mayor facturación mayor es la complejidad.
Para que es no nos suceda hay que conocer y “dominar” la empresa, de esta manera crecer no empeorar todo.
Para entender esta situación y a su vez avaluar la situación en que se encuentra nuestra pymes vamos a hacer una “clasificación” de las etapas de nuestro negocio, para ello nos vamos a basar en el libro “Etapas de las Pymes” de Quiros, quien establece diferentes fases en la creación de negocios:
     La emprendedora
     La expansiva
     Estructuración
     Reactiva
     Consolidación
Quiros expresa que la supervivencia de los emprendedores es bajísima: apenas uno de cada doce llega a superar los 2 años.
En la fase expansiva, las ventas crecen muy fuertemente, y el empresario o emprendedor opera como un gran comodín: si es preciso arreglar un desperfecto eléctrico o armar un mueble lo hace, “se siente capaz de todo”. Pero también existe la posibilidad se vuelva obsesivo por el trabajo sin darse cuenta, hasta el punto de aislarse de la los amigos o la familia. Pese a esta situación en esta fase se demuestra una mortandad alta, solo el 47%  de los emprendimientos que superaron los dos años llegan al quinto.  
Esta situación se debe a que en algún momento el emprendedor se ve superado por el crecimiento de pyme, son muchos los “agujeros” a tapar y es necesaria un re-estructuración de la misma. Hay dos señales que marcan el comienzo de la re-estructuración, primero piden ayuda al profesional más directo que poseen pero que no quieren tener una relación cercana, que es el Contador (generalmente el emprendedor cree que pierde el tiempo escuchando las recomendaciones de él) Es ahí donde el contador debe comenzar a asesorar organizando lo fundamental: circuitos y procedimiento. La segunda señal es la necesidad imperiosa de mudarse, conocido como el “síntoma de la mudanza” anteponiendo cuestiones como “el emprendimiento creció, es más complejo, necesita más espacio y separación de tareas”
Podes entonces, definir tres desafíos a encarar en esta etapa para poder superarla:
1.    Ensayar formas efectivas de delegación
2.    Mantener una mirada integradora o sistemática del emprendimiento (debe armar un organigrama y un mapa de procesos para mejorar el rendimiento de cada área).
3.    Aceptar su propia soledad, pues generalmente los empleados toman distancia. Entender y superar este sentimiento, es clave para mantener y poder ejercer el liderazgo en un futuro.
Preguntas que debe hacerse al momento de analizar su emprendimiento
¿Se asume como un emprendedor o un empresario?
Generalmente el emprendedor dice que fue a la facultad de la calle, que su aprendizaje lo hizo a fuerza de errores y aciertos. Pero la cuestión es asumirse como un empresario, no importa si tiene un título de licenciado, ingeniero, contador, etc. Lo importante es asumirse como lo que es, un empresario; hacerlo lo ordenara muchísimo en su trabajo, le aclarara su rol en el emprendimiento.
¿Diversifica su emprendimiento?
La diversificación es muy peligrosa, es la principal causa de cierres de las pymes. Muchos empresarios fundacionales quedan atrapados en el paradigma de que la facturación es el reconocimiento de estar haciendo las cosas bien. Y cuando surgen problemas de ventas, buscamos que más podemos vender, empezamos a decir que si a todos los pedidos de los clientes, que a su vez piden muchas cosas distintas y perdemos el foco.
Creer que organizando el organigrama la empresa a funcionar bien ¿puede jugarle en contra?
Hay una concepción de pensar de que si cada área hace las cosas bien, el resultado final va a ser bueno, pero esto no es cierto. La empresa es un fenómeno sistémico, por eso, la demanda de eficiencia en cada área por separado puede llevar a veces a aislar a la gente e impide que se trabaje bien en equipo. Para evitar esta situación es de vital importancia que se junten para hacer reportes de gestión, busquen soluciones en conjunto  a los problemas, fijar metas y objetivos, etc. En lugar de que cada uno cuide su “quintita”.
¿Qué importancia tiene obtener un crédito en cada etapa?
Hay que tener cuidado con respecto a la necesidad de tomar un crédito. Tener acceso a financiamiento es bueno a partir de la etapa de construcción, pero en la fase de expansión lo que hay que tener es capital de trabajo y no stock o maquinaria de más.
Otro mito a derrumbar es que “no es bueno que el empresario tenga un patrimonio por fuera de la empresa”. Todo lo contrario, es mejor que si los tenga, porque le va a permitir mirar los riesgos empresariales con más tranquilidad.

Lic. Devolder Adriel