Ing. Ag. Víctor Veik
Cr. Matías Méndez
Marzo – 24
El cultivo de ray grass, una
gramínea forrajera de invierno, es una opción interesante en la rotación de
cultivos y en sistemas ganaderos por su capacidad de ofrecer pasto de calidad
en épocas donde la oferta forrajera es limitada. Existen varios aspectos
relevantes para su manejo eficiente y rentable.
Manejo del Cultivo:
El manejo del ray grass incluye
la correcta elección de la variedad, la fecha de siembra, la densidad, y su
control. Dependiendo del manejo, y más si se le va a realizar un pastoreo hasta
mediado de agosto, es importante su fertilización, especialmente con nitrógeno,
para potenciar el crecimiento y la producción de forraje. A su vez debemos
tener en cuenta que dosis excesivas de nitrógeno pueden llevar al volcamiento
de plantas, lo cual complica la cosecha y reduce el rendimiento, para esto
existen tratamientos con retardadores, aunque no son económicos, en esta
campaña, en algunas situaciones, su utilización dio buenos resultados.
Cosecha y Post-Cosecha:
La cosecha del ray grass debe
realizarse en el momento óptimo para maximizar la calidad del forraje y el
rendimiento en grano, teniendo en cuenta primero un hilerado. Si bien esta
campaña se ha cosechado después de un par de lluvias luego de hilerado, no es
lo ideal, por eso hay que estar atento a las condiciones climáticas del momento.
Existen dos maneras de comercializarlo, sucio o limpio, en el análisis
económico, se contempla la limpieza del cultivo y un flete hasta la planta de
acondicionamiento. Las mermas que se observan generalmente van entre un 12 a un
20%, dependiendo las condiciones de cosecha y demás variables.
Rentabilidad:
En esta campaña que pasó, se han
registrado rindes promedios de 690 kilos limpios (después de acondicionamiento)
por ha, con picos de hasta 850 kilos en lotes donde se tuvo que aplicar
retardador de crecimiento para evitar el volcamiento de plantas, por ese motivo
para proyectar márgenes se utiliza este promedio.
Ofrece un mejor margen proyectado que el trigo, de U$S 232 por ha., con un precio de venta de U$S 1.200 la Tn, que son los valores que se han obtenido en la campaña pasada, por kilo limpio. Ahora bien, hay que tener en cuenta que hasta el momento no se han cerrado precios para la nueva campaña, hay que estar atento a esta variable, ya que de bajar a U$S 900 el margen queda igual que el trigo. Si bien, existe la posibilidad de complementar el ingreso mediante la venta de carne, aprovechando el pastoreo del ray grass, lo que podría aumentar significativamente la rentabilidad del cultivo. Para el manejo sin pastoreo, hay que estar atentos al precio.
Consideraciones impositivas y financieras: aspectos no incluidos en el análisis
Este cultivo ofrece un plus interesante,
para aquellos productores que acumulan crédito fiscal de IVA. Los convenios con
los semilleros se facturan con IVA del 21%, esto permite recuperar IVA
acumulado, y esto genera un impacto financiero.
En el análisis tampoco se han incorporado los posibles intereses por financiamiento, porque en cada situación puede variar, y se recomienda evaluar detenidamente los costos financieros y la estructura de capital, en el contexto específico de cada productor.
Desafíos y Oportunidades:
Se reconoce que el cultivo de ray
grass enfrenta desafíos como la variabilidad climática y su comercialización.
Sin embargo, también se destacan las oportunidades que ofrece para mejorar la
eficiencia en sistemas ganaderos y la sostenibilidad de las rotaciones
agrícolas.
En resumen, el cultivo de ray
grass se presenta como una opción forrajera con un buen potencial de
rendimiento y rentabilidad, siempre y cuando se maneje adecuadamente y se tomen
decisiones correctas en cada etapa del proceso productivo.
